Durante el segundo juego de la serie Piratas-Guerreros, el equipo de casa mostró una leve mejoría, aunque paso grandes apuros al dejar a muchos hombres en los senderos, siendo que el batazo oportuno no llega, aun estando con bases llenas y sin out, lo que refleja que la ofensiva sigue siendo el talón de Áquiles del club, el manager Lino Rivera ha buscado acomodar a los jugadores de tal manera de romper el maleficio que pesa sobre el equipo, al no poder ser el home club que tenga los arrestos para ser una frontera impenetrable y muchos triunfos se han ido por no contar con un líder en el departamento, ello desde que CJ Reterford entró en un bache en su bateo y Dave Sapelt no ha respondido al cien en ese plano.
Lino Rivera, ha puesto mucho interés en mover a los jugadores y así como ha puesto a Francisco Williams, quien se ha desempeñado extraordinariamente en el jardín izquierdo, que por cierto en el primer juego realizó una excelente atrapada y en el segundo estuvo a punto de hacer una mejor, ha respondido, como el caso del joven jugador Jasson Atondo, que ya se despachó con su primer cuadrangular en la LMB y aunque desde su llegada se habló muy bien de él, aun no cuaja pero poco a poco va integrándose al equipo sobre todo cumpliendo donde el manager lo ha utilizado.
El equipo va caminando a duras penas, el pitcheo se sigue comportando como desde el arranque de la temporada, José Luis Castillo cumpliendo en una salida más y agenciando el triunfo, y los relevos que quizás ahí también se ha tenido un poco de falla, Issac Jiménez, quien hay ocasiones que sale con el santo de espaldas, en esta ocasión cumplió, al igual que Scat, quien de plano no sabemos porque lo tienen ahí, sí se cuenta con gente de más confianza.
Quien de plano se ve que sabe su trabajo es Joan Yam a quien le vimos lanzar totalmente controlado y dominador, que es lo que el equipo necesita un cerrador de esas características, por lo que de nueva cuenta el pitcheo sigue siendo la base de los triunfos del equipo que lo mantienen en el cuarto sitio de la Zona Sur aunque muy lejos del primer lugar que es el Puebla y a escasos 4.5 del tercero que son los Tigres, por lo que al cerrar la primera parte de la temporada, estarán en posición de clasificación, aunque después del Juego de Estrellas que es este fin de semana, al iniciar la recta final si no se apuntala el bateo que es el dolor de cabeza de Lino Rivera, las cosas pudieran ser de malos augurios.
De seguir contando con la colaboración de los equipos de abajo que se ven que no levantan, las cosas pudieran mantenerse tal cual, pero en el béisbol las cosas cambian en cualquier momento y los Piratas han tenido suerte con los resultados que los mantienen donde están, pero no hay que confiarse porque se pueden quedar en la orilla o cuando menos tendrían que pelear como ya les sucedió en un partido extra para lograr un boleto a la postemporada.
Si la directiva no se mueve y que lo vemos casi imposible, y no darle al equipo un líder a la ofensiva, el equipo va a batallar mucho para llegar a la postemporada, hay confianza en que las cosas salgan bien, pero no hay que dejarlo a la suerte en cada partido, se está a tiempo de buscar a alguien que apuntale al equipo y como suele suceder los equipos dejan en el camino a jugadores que no les dan resultado y que por lo general con un cambio comienzan a funcionar, así que hay de donde buscar, lo interesante es ver si la directiva tiene en mente esto o se van a morir con lo que ya se tiene, si es así que los agarren confesados porque el cierre de campaña será más intenso y todo puede suceder.
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